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Lo recuerda perfectamente. Este ha sido el peor año de su vida, pero al mismo tiempo es la primera vez que alguien de quien está enamorada le ayuda a sobrellevar toda la mierda que se le ha estado viniendo encima. Así es, que ha vivido momentos de lo más tristes y ha llorado más que nunca; pero gracias a él, ha vivido también momentos inolvidables, que podría definir como los mejores de su vida. Por esto lo recuerda tan bien. Recuerda aquella mañana con felicidad, con alegría más que con ternura. Aquella mañana en la que se levanta y lo primero que ve es un mensaje insinuante de ese por el que se le pira la tostada. De ese por el que está coladita hasta los huesos. De ese que lleva 6 años con su novia. Recuerda perfectamente como se lo contesta, y como acaban hablando de quedar. Aún no se conocen lo suficiente, pero los dos son igual de impacientes, y la cita surge para esa  misma noche. Ella está sola en casa, apenas tienen dos horas. Ahora ella recuerda el modo en que el entró en su casa y la siguió escaleras arriba. Si se esfuerza un poco, aún siente los nervios y el dolor de barriga. Recuerda como le temblaba todo el cuerpo cuando se sentó en su cama y lo miró con cara picarona. Apenas tres segundos más tarde lo tenía encima. Recuerda dos de las frases que jamás olvidará: "nunca dejes escapar algo que quieres y te gusta de verdad" y "me voy, y por hoy no jugamos más, porque verás como conmigo tendrás todo el tiempo del mundo para jugar." Aquella noche y aquel chico. Su primera vez. Podría parecer una locura, porque no se conocían de nada, él tiene una pareja que jamás dejará... Es más; lo era. Era la locura más grande. El riesgo más peligroso. El secreto peor guardado. La historia más complicada. Pero al mismo tiempo, también había sido lo más bonito para ambos. Cada pelea, cada reconciliación, cada rincón, viaje, canción, llamada, beso, caricia... Porque a veces, cometer una locura es lo mejor que te puede pasar. Lo recuerda todo y sonríe. Él también se lo ha hecho pasar mal muchísimas veces. Ahora, incluso no pasan por su mejor momento. Sigue con su chica, y siguen teniendo que verse a escondidas. Pero está enamorada. Recuerda este día, el día que le cambió la vida. Y piensa en cómo jamás podría haberlo imaginado. Joder, que bonito es el puto amor, y que asco da al mismo tiempo. Y se ríe, y tiene tantas ganas de verlo y de abrazarlo, que es feliz. Y joder, como pasa el tiempo.

Un año, y sigo temblando como la primera vez que subió las escaleras de mi casa.