Aráñame. Muérdeme. Acaríciame. Bésame. Dame la mano. Ríete de mi. Vuélveme loca. Tócame. Hazme reír. Miénteme para hacerme feliz. Susúrrame al oído. Ponme celosa. Ponte celoso. Dime que te vuelvo loco. Que no sabes por qué te gusto. Dime que estoy acabando contigo. Ríete de mis tonterías. Llámame enana. Enfádame y pídeme perdón. Di que soy una mimada. Escóndete. Que no nos vean. Hazme sentir como sólo tú sabes. Grítame y arrepiéntete. Dame un abrazo. Cuéntame historias. Mírame con esos ojos. Tus ojos; mi mayor debilidad. Ponme esa sonrisa picarona. Llega tarde a todas partes por mi culpa. No seas capaz de vivir sin mi. Sueña esta noche conmigo. Llámame por las noches y dime que estás en mi portal, o simplemente que sólo pretendías despertarme. Dime que tengo una poya en el cerebro incrustada para que me ponga colorada. Pregúntame qué me pasa para que te diga que lo único que me pasa eres tú. No discutamos ahora. Todavía no es el momento. No existen los problemas, si estoy junto a ti. No me digas que quieres ser mi mejor amigo. Plantéate un futuro conmigo aunque sea a largo plazo. Quiero ser tu amante y estar contigo noche y día. Escóndeme en cualquier parte y amémonos. Sácame de quicio y deja que te grite. Ríete para que me enfade, y consigue que se me pase. No estamos haciendo lo correcto, pero no siempre es peor lo malo, y lo bueno lo mejor. Sigue haciéndolo como asta ahora. No vas mal. Sonríeme. Dame un beso. Hagámoslo una vez más.
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